Al proyectar el monumento, Josep Vilaseca i Casanovas quiso darle un estilo neomudéjar, para ello utilizo el ladrillo rojo típico de ese tipo de construcciones y de fácil mantenimiento al ser construido en un lugar que sufría constantemente las inclemencias del tiempo. |
Para su construcción, Vilaseca se apoyó en otros artistas catalanes para desarrollar la parte escultural del monumento. En el frontal Josep Reynés hizo un friso en la parte frontal del arco en su parte delantera en la que figuraba la frase Barcelona recibe las naciones, “Barcelona rep les nacions”. La parte trasera del arco el que daba al parque de la ciudadela la realizo Josep Llimona. El lado derecho corrió a cargo de Antoni Vilanova que reprocujo alegorías a la industria, agricultura y comercio. En el lado izquierdo, Torquat Tasso dedico su trabajo a las ciencias y las artes. Para finalizar Manel Fuxà y Pere Carbonell hicieron cuatro esculturas femeninas. |
Pasada la exposición, el lugar fue aprovechado para la realización de finales de eventos deportivos, fue durante un tiempo la meta de llegada de una prueba de atletismo “Jean Bouin” y “La Maratón de Barcelona”. En 1990 tuvo lugar una restauración para arreglar los pequeños desperfectos ocasionados por el tiempo. |
En la actualidad la zona está completamente dedicada a el paseo tranquilo de las personas y sigue siendo imaginariamente la entrada del parque de la Ciudadela. |